En Xilxes, Ismael Minguet ha sido investido como alcalde en medio de un ambiente de poco respeto institucional con tracas en medio del pleno que lo han interrumpido.
Ismael es un viejo conocido de la política local,
habiendo dejado el gobierno anteriormente en 2015 endeudado y con dificultades económicas para el pago de proveedores del ayuntamiento.
El pleno de investidura se vio interrumpido por tracas y con una notable falta de respeto institucional. Además, hubo una sobreactuación con himnos de España, y más himnos a través de la megafonía municipal, cuando el PP se ha radicalizado y esta pactando con la ultraderecha que rechaza a muchos españoles. En Xilxes esta ultraderecha se ha quedado dentro del PP de Minguet y empieza a notarse su radicalidad y falta de moderación con sus sobreactuaciones. Por otro lado ahora falta ver la distribucion de concejalias y el peso que tomaran los concejales mas ultras.
Es importante recordar que uno de los lemas del PP era "Xilxeros de veritat", insinuando que había ciudadanos de Xilxes que eran considerados falsos xilxeros, un lema muy poco integrador.
Por otro lado, el discurso político de Ismael durante la investidura ha sido considerado pobre y muestra un desconocimiento sobre las competencias y limitaciones de su cargo. Ha realizado promesas que no dependen de él, ya que son competencia de otras instituciones, lo que evidencia sus carencias políticas.