Atónitos nos hemos quedado leyendo el último artículo del portavoz del PP en Xilxes, publicado en laplanaaldia.com, artículo lleno de imprecisiones, falacias y muchos actos de fe. Porque las opiniones para ser creíbles y tener la pretensión de convencer, hay que acompañarlas con datos con el fin de dotar la subjetividad de objetividad manifiesta. Martínez empieza diciendo que solo los que se sitúan en el espectro ideológico del PP creen en la libertad, la democracia y el respeto. Es decir, todos los demás que no comulgamos con un partido cuya mayoría dirigente no ha condenado el régimen fascista de Franco, no creemos en los valores antes citados. Continúa el disparate diciendo que los votantes del PP son más sensibles ante la corrupción, y que los casos de otros partidos son “cualitativa y cuantitativamente infinitamente más importantes”.

Vamos a reconocerle al portavoz que es cierto que la corrupción afecta a algunos partidos, sobre todo a los dos que se han ido turnando desde la Transición, tal como ocurría en el sistema Restauracionista, pero no afecta a todos los partidos. Son especialmente graves aquellos casos de corrupción que involucran al partido que gobierna el país, ya que la responsabilidad y la oportunidad que se asume es mayor. Personas relevantes del PP tienen causas abiertas en los juzgados españoles, por citar algunos: Trama Gürtel, Operación Pokémon, Caso Noos, Tarjetas Black, Operación Púnica, Caso Brugal, Operación Campeón (40 imputados), Operación Carioca (100 imputados varios partidos políticos), Caso Bankia, Caso Bárcenas, Caso Fabriquilla, Caso Troya, Caso Over Marketing, Caso Tótem, Caso Novo Carthago, Caso Roblecillo, Caso Umbra, Caso Dúplex, Caso Zerrichera, Caso De Santos, Caso Faycán, Caso Catis, Caso Mercurio, Caso Kibesan, Caso Cooperación, Caso Emarsa, Caso Fabra, Caso Rabasa, Caso RTVV, caso Imelsa, y todas las ramificaciones que cada una de estas tramas posee.

¿De verdad alguien puede pensar que la corrupción en el Partido Popular es algo puntual? No se trata de casos aislados porque se encuentran repartidos por toda la geografía del Estado. En Baleares por ejemplo, encontramos numerosos cargos del PP imputados en sumarios como el Bomsai, Caso Inestur, Caso Palma Arena, Caso Andratx, Caso Cañenas/Sant Elm, Caso Scala, Caso Bitel, Caso Turismo Joven, Caso Ibatur, Caso Funeraria Palma, etc. En Castilla y León, región largamente gobernada por el PP, se investigan 78 casos de corrupción política que implican de forma grave al PP; Madrid, Comunidad Valencia, Murcia, Galicia, y así un largo etcétera. Estos casos de corrupción que se acumulan en los tribunales involucran a centenares de políticos del PP, siendo también un problema que alcanza desde concejales hasta presidentes de las comunidades autónomas y exministros.

En La Comunidad Valenciana, gobernada por el PP desde 1995 son más de 130 los políticos del PP que están envueltos en diferentes causas judiciales, entre ellos expresidentes de Diputación como Carlos Fabra y Alfonso Rus, exalcaldes como Sonia Castedo, expresidentes de la Generalitat Valenciana como José Luis Olivas, o exconsellers como Serafín Castellano, Juan Cotino o Rafael Blasco, el cual para más repugnancia está en la cárcel por robar dinero destinado al Tercer Mundo.

La manera de gobernar del PP se ha basado en ocupar las instituciones, y desarrollar un clientelismo político propio de otro siglo, para enchufar a amigos y familiares en numerosos puestos. Habría que recordarle al portavoz de Xilxes del PP, el que dice que es implacable contra la corrupción, que corrupción también es practicar el nepotismo, es decir el enchufismo, ninguneando las personas que cumplen con los criterios de mérito y capacidad que se ven condenadas al paro. Casos, bien sabe que hay incalculables; exmujeres, secretarias, hermanos son los colocados en instituciones como la Asamblea de Madrid[1], por nombrar un caso. Hay otros casos muy cercanos. Corrupción es practicar la plutocracia, o el gobierno que representa a quienes le son afines, obviando la voluntad de la ciudadanía. Así es como el PP ha vendido gran parte de los servicios públicos como la sanidad y la educación (empresarios de la Trama Púnica se han enriquecido con la instalación de barracones en escuelas valencianas), hasta las viviendas sociales han sido concedidas a fondos buitres mientras se desahuciaba a familias enteras por varios ayuntamientos como el de Madrid, al frente del cual estaba la mujer del expresidente.

Podemos seguir a ver si el portavoz del PP en Xilxes es capaz de sonrojarse. El gobierno del PP valenciano ha sido el primero en ser multado por Bruselas por falsear sus cuentas[2], también el PP ha sido un partido que ha enviado datos falsos al Tribunal de Cuentas durante 12 años.[3] ¿Cuántos dirigentes del PP poseen cuentas en Suiza? Los tres tesoreros del PP han tenido cuentas en dicho país, Bárcenas, Naseiro y Sanchís, es más casi todos los tesoreros del PP han sido procesados por corrupción. Hasta las obras de la sede del PP en Madrid se han pagado con dinero negro[4], según los péritos de Hacienda. ¿Cómo se atreve a hablar de la financiación “extranjera” de “algún partido”, (que no se decide a nombrar porque sabe o debería saber que la querella por financiación con dinero iraní y venezolano contra Podemos se ha archivado[5]), cuando se va a juzgar nada más y nada menos que un partido político, al suyo, sí al Partido Popular, por la financiación irregular que desde tiempos de Alianza Popular parece presuntamente que han practicado?, o ¿es que no se acuerda de la contabilidad B, o es que no quiere mencionar el borrado de discos duros de los ordenadores de la sede del PP por el método Guttman, técnica de borrado seguro por el cual los discos se formatean hasta 35 veces? Periódicos alemanes como Die Tageszeitung, comparaba hace poco al PP y a Bárcenas con la mafia, mientras el Financial Times, presagiaba un “oscuro futuro”, no solo para Rajoy sino para todo el PP debido a los múltiples escándalos de corrupción. Únicamente se ha abierto un poco la tapa de la alcantarilla y ya apesta de forma insoportable. Cuidado, porque esto posiblemente sea tan solo la punta del iceberg.

Auguramos que los casos seguirán emergiendo, últimamente se ha abierto el asunto de Acuamed o la mafia del agua, donde el exministro Arias Cañete está señalado como responsable de las adjudicaciones irregulares a esta empresa.[6] Sale estos días a la luz la trama del Canal de Isabel II, donde se dice que ahí han robado lo que no está escrito. Y posiblemente no tardará en explotar la malversación en Mercamadrid.[7] Si atendemos a nuestra región, la policía judicial va a interrogar a 50 militantes del PP valenciano por haber posibilitado el blanqueo de comisiones millonarias amañando contratos desde la propia diputación de Valencia.[8] La prensa acaba de publicar cómo una empresa sufragó parte de la campaña de la presidenta regional del PP valenciano, Isabel Bonig, en el 2011, un año antes, esta empresa logró la contrata del alumbrado público en La Vall d’Uixó.[9] El recién investido diputado del PP Óscar Clavell, exalcalde del citado municipio y delfín de Bonig, ha sido acusado de malversación de caudales públicos, prevaricación y fraude, por el pago irregular a una empresa de limpieza.[10]

Robar, quitar, desvalijar, asaltar, depredar, rapiñar, malversar, atracar, sustraer,… ¿cuál de estos verbos no entiende el portavoz del PP en Xilxes?, ¿se ha enterado de que el PP es el primer partido que ha sido imputado en la historia de la democracia?, ¿de que el dinero que han robado al pueblo trabajador ya supera los recortes? Hace unos días, Carles Mulet, senador por Compromís preguntaba por qué la Fiscalía del Estado no ha abierto el procedimiento de ilegalización del PP por “organización criminal”[11], Mulet ha verbalizado lo que gran parte de la ciudadanía se pregunta a estas alturas.

Una última cuestión (al tiempo que cerramos el artículo y surge la noticia de que el juez inicia los trámites para imputar a Rita Barberá por blanqueo[12]), si tan implacable dice mostrarse contra la corrupción el portavoz del PP de Xilxes en su pseudoartículo victimista e infantiloide, ¿por qué hasta ahora no ha levantado su voz una sola vez para que la gente imputada de su partido dimita de sus cargos políticos hasta que al menos se resuelvan los juicios, aunque incida en la presunción de inocencia? Insiste más en la presunción de inocencia que en la condena de la corrupción. Y el hecho objetivo que nadie puede negar, es que EL DINERO NO ESTÁ.

SECRETARIA DE COMUNICACIÓ D'ESQUERRA UNIDA XILXES 

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