El año pasado, durante las festividades de San Roque en Xilxes, nuestro pueblo fue sacudido por una trágica noticia: una menor denuncio una terrible agresión sexual en las fiestas de la playa. Este desgarrador suceso puso en evidencia la necesidad urgente de contar con mecanismos efectivos de prevención y respuesta ante situaciones de violencia de género.

En respuesta a esta situación, Esquerra Unida de Xilxes solicitó a la Alcaldía y al área de Fiestas la instalación de un Punto Violeta real, un espacio seguro al que cualquier mujer pudiera dirigirse en caso de encontrarse en peligro o de sufrir alguna agresión sexual. Este tipo de puntos son fundamentales para brindar apoyo, asesoramiento y protección en situaciones de vulnerabilidad durante eventos masivos, como son las fiestas patronales o las de San Roque.

Sin embargo, a pesar de la gravedad de lo sucedido y de la evidente necesidad de acción, el concejal de Fiestas, Ximo Manzano no tomó ninguna medida durante los festejos que quedavan esa semana ni durante el año pasado, para prevenir que situaciones similares se repitan. La agresión ocurrió durante la semana de San Roque, cuando la localidad celebra una de sus festividades más importantes, y a pesar de ello, no se implementaron medidas adicionales de protección para las mujeres para acabar la semana en las numerosas discomoviles.

Un año después, la situación no ha mejorado. El alcalde, Ismael Minguet había respondido a la solicitud de Esquerra Unida asegurando que se estaba preparando un convenio con la Cruz Roja o otras entidades para establecer un convenio y protocolo adecuado. Sin embargo, a las puertas de las nuevas fiestas de San Roque, no se ha hecho absolutamente nada. La promesa de un convenio ha quedado en el aire, y seguimos sin un Punto Violeta que garantice la seguridad de los asistentes a las festividades y todos sus actos.

Desde Esquerra Unida de Xilxes, reiteramos nuestra exigencia de que se deje de jugar con un asunto tan serio. No estamos pidiendo gestos simbólicos o medidas superficiales. Exigimos la implementación inmediata de un Punto Violeta real, acompañado de un protocolo de coordinación efectivo con las fuerzas de seguridad. La agresión sufrida por la menor el año pasado fue extremadamente grave, y no podemos permitir que algo similar vuelva a ocurrir sin haber tomado medidas.

Es responsabilidad de nuestras autoridades locales garantizar la seguridad de todos los ciudadanos, especialmente durante eventos masivos. Es hora de que la Alcaldía y el área de Fiestas dejen de hacer oídos sordos a esta solicitud y actúen con la seriedad y urgencia que la situación demanda. El pueblo de Xilxes merece unas fiestas seguras, donde todos, especialmente las mujeres y niñas, puedan disfrutar sin miedo.

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